Las fundas de seda para bebé tiene un tamaño de 35×55 cm, por lo que son más pequeñas que los otros dos formatos disponibles y estas dimensiones son las más óptimas para el movimiento y la comodidad de los recién nacidos.
Aunado a un tamaño específicamente ajustado para el confort del bebé, estas fundas de seda se distinguen por su carácter hipoalergénico: la hoja de morera ofrece una excepcional resistencia a las bacterias, los ácaros y los agentes alergénicos.
Por otra parte, la glicina de la seda de morera favorece la salud de la piel. El conjunto de estas propiedades convierte a las fundas de seda para bebé de 35×55 cm es una grandiosa opción para esos pequeñines.